
La motilidad gastrointestinal es esencial para el movimiento eficiente de los alimentos a lo largo del tracto digestivo. Sin embargo, ciertas alteraciones pueden provocar trastornos que afectan significativamente la calidad de vida de los pacientes. En este artículo, exploraremos los trastornos más comunes de la motilidad gastrointestinal, sus síntomas y tratamientos, proporcionando detalles útiles para los profesionales médicos.

¿Qué son los Trastornos de la Motilidad Gastrointestinal?
Los trastornos de la motilidad gastrointestinal son condiciones en las que el movimiento coordinado de los músculos en el tracto digestivo se ve alterado, lo que impide el tránsito normal de alimentos, líquidos y desechos. Estas disfunciones pueden ser primarias (idiopáticas) o secundarias a otras enfermedades sistémicas. Algunos de los trastornos más importantes incluyen el síndrome de intestino irritable (SII), la acalasia, la gastroparesia y el trastorno de motilidad intestinal crónica idiopática (TIMIC).
Síntomas Generales
Aunque los síntomas varían según el trastorno específico, los más comunes incluyen:
- Dolor abdominal.
- Distensión abdominal.
- Náuseas y vómitos.
- Alteraciones en las deposiciones (estreñimiento, diarrea o ambos).
- Sensación de saciedad temprana.
Trastornos Principales
1. Síndrome de Intestino Irritable (SII)
El SII es uno de los trastornos funcionales más frecuentes y se caracteriza por dolor abdominal recurrente asociado con cambios en los hábitos intestinales. Aprende más al respecto en el curso gratuito de Neurogastroenterología, avalado por la Asociación Mexicana de Neurogastroenterología y Motilidad.
Causas:
- Factores genéticos, microbiota intestinal alterada y estrés psicológico.
Síntomas más comunes:
- Dolor abdominal crónico.
- Diarrea, estreñimiento o alternancia entre ambos.
Tratamiento:
- Terapia dietética (dieta baja en FODMAPs).
- Antiespasmódicos como el bromuro de otilonio.
- Terapias psicológicas como la terapia cognitivo-conductual (TCC).
El manejo holístico que combina modificación dietética con terapia conductual muestra resultados prometedores en pacientes difíciles de tratar.
2. Acalasia
La acalasia es un trastorno motor en el que el esófago pierde su habilidad para empujar los alimentos hacia el estómago debido a la falla en la relajación adecuada del esfínter esofágico inferior.
Síntomas:
- Dificultad para tragar (disfagia).
- Regurgitación de alimentos no digeridos.
- Pérdida de peso.
Tratamiento:
- Dilatación neumática endoscópica.
- Miotomía de Heller asistida por laparoscopia.
- Terapia farmacológica, como bloqueadores de calcio o nitratos, para disminuir la presión esofágica.
El tratamiento endoscópico con dilatación neumática se considera la opción inicial en muchos casos no quirúrgicos.
3. Gastroparesia
La gastroparesia es una condición que se caracteriza por el retraso en el vaciamiento gástrico sin obstrucción mecánica.
Causas:
- Diabetes mellitus.
- Cirugías gástricas previas.
- Enfermedades autoinmunes.
Síntomas:
- Náuseas persistentes.
- Saciedad temprana.
- Vómitos de alimentos no digeridos.
Tratamiento:
- Cambios dietéticos, prefiriendo comidas pequeñas y bajas en grasas.
- Medicamentos como la metoclopramida, itopride o eritromicina.
- Uso de marcapasos gástricos en casos graves y refractarios al tratamiento convencional.
Un análisis reciente subraya la necesidad de individualizar el tratamiento para optimizar los resultados clínicos.
4. Trastorno de Motilidad Intestinal Crónica Idiopática (TIMIC)
Este es un problema poco frecuente pero debilitante asociado con tránsito intestinal extremadamente lento.
Síntomas:
- Estreñimiento severo crónico.
- Distensión abdominal importante.
Tratamiento:
- Uso de laxantes osmóticos o secretagogos como el linaclotide.
- Biofeedback para mejorar la coordinación muscular.
- Cirugía en casos graves y específicos.
Se recomiendan estrategias no invasivas como cambios dietéticos y biofeedback como primera línea de tratamiento.
Enfoque Integral para el Manejo de los Trastornos de Motilidad
El tratamiento de los trastornos de motilidad gastrointestinal debe abordarse desde una perspectiva integral. Factores como el manejo dietético, el apoyo psicológico y, cuando sea necesario, la intervención farmacológica o quirúrgica son esenciales para garantizar una óptima calidad de vida para los pacientes.
Además, el análisis continuo de la microbiota intestinal y la implementación de terapias personalizadas abrirán nuevas puertas para el tratamiento de estas enfermedades en los próximos años.
Referencias
- Shin, Andrea. Disorders of gastric motility. The Lancet Gastroenterology & Hepatology, Volume 9, Issue 11, 1052 - 1064. https://www.thelancet.com/journals/langas/article/PIIS2468-1253(24)00231-0/abstract
- Vaezi, Michael F. MD, PhD, MSc, FACG1; Pandolfino, John E. MD, MS, FACG2; Yadlapati, Rena H. MD, MHS (GRADE Methodologist)3; Greer, Katarina B. MD, MS4; Kavitt, Robert T. MD, MPH5. ACG Clinical Guidelines: Diagnosis and Management of Achalasia. The American Journal of Gastroenterology 115(9):p 1393-1411, September 2020. | DOI: 10.14309/ajg.0000000000000731 https://journals.lww.com/ajg/fulltext/2020/09000/acg_clinical_guidelines__diagnosis_and_management.18.aspx
- Henry P. Parkman, William L. Hasler, Robert S. Fisher. American Gastroenterological Association technical review on the diagnosis and treatment of gastroparesis,
- Gastroenterology, Volume 127, Issue 5, 2004, Pages 1592-1622, ISSN 0016-5085, https://doi.org/10.1053/j.gastro.2004.09.055.